La astringencia y el picor. Las mucosas epiteliales reaccionan ante sensaciones térmicas y táctiles. Cuando realizamos una cata, hablaremos del tacto activo, que es el que se produce en la lengua y el tacto pasivo, que es el que sentiremos en el paladar, mejillas y labios.
Hay catadores que opinan que la sensación de astringencia, es táctil. La temperatura, el calor y la untuosidad que producen algunos alcoholes, son percibidos con el tacto, al igual que la causticidad que contienen ciertos ácidos del vino.
Sabores y aromas, junto con las sensaciones táctiles de las que hablamos, evocan imágenes en relieve con formas geométricas.